
Salir a la normalidad, puede ser más intimidante que la cuarentena. ¿Estaremos listos? El tiempo pasó y poco a poco algunos países van regresando a la luz y algunos de nosotros quisieramos quedarnos en la comodidad de lo conocido. Esta lección está inspirada por el escrito del querido editor de mi libro Los ciclos del alma, Juli Peradejordi, en su libro Cuentos para conocer a Dios, ambos de Ediciones Obelisco, cuando nos comparte que tal como el polluelo picotea el cascarón avisando, cuando estemos listos, necesitamos estar dispuestos a pedir ayuda a Dios para salir de nuestro propio cascarón. El cascarón puede ser nuestra casa, el internet, una relación o un trabajo sin salida, como puede ser una vida llena de libertad, pero igualmente solitaria. Cada paso hacia el frente es un adiós a quien éramos ayer. Estar cómodos no significa necesariamente que estemos en el lugar que nos corresponde; lo familiar no siempre es progreso. Lloramos al nacer, porque estamos muy cómodos en la oscuridad, pero tal como los polluelos, un día nos toca ese momento de salir del cascarón. La diferencia entre el ser humano y el polluelo, es que el segundo tiene la responsabilidad de avisar a la gallina que ya está listo para salir a la vida exterior. A los seres humanos nos entregan el libre albedrío más tarde en la vida, cuando necesitamos ser los que decimos a Dios que ya estamos listos, que nos ayude a trascender cada cascarón.
Salir de la rutina y lo conocido, puede ser el momento más aterrador en la vida, pero igualmente puede ser el tiempo más esperanzador. La alternativa de no crecer, es morir en vida. La oscuridad de lo conocido nos engaña con su falsa seguridad, porque tal como el bebé que va a nacer, cuando es hora de salir, saldrá sí o sí. A estos momentos en la vida se les llama crisis, yo les llamo metamorfosis, o simplemente ciclos. Hora de salir a la luz. Nos ha llegado una nueva oportunidad, tal como siempre lo hace en cada amanecer. Pide a Dios cuando te sientas listo, y da el paso hacia la luz. Los valientes no caminan solos.